En un debate en el Foro Económico Mundial dedicado a las negociaciones del nuevo tratado internacional contra el cambio climático -que debe aprobarse en diciembre en una cumbre en Copenhague-, Gore dijo que la capacidad de que EU se comprometa con ese acuerdo depende en gran medida del apoyo que obtenga del resto de países. El Tratado de Copenhague es negociado en el marco de Naciones Unidas y reemplazará al Protocolo de Kyoto (1992), que nunca fue ratificado por EU. Gore sostuvo que si los países -en particular los de economías emergentes- se comprometen legalmente y en bloque a cumplir las disposiciones de ese acuerdo, para EU será más fácil conseguir el apoyo de su opinión pública para firmarlo y ratificarlo. "Si Estados Unidos, Japón y Europa occidental recortasen totalmente sus emisiones (de dióxido de carbono), la crisis climática continuaría por la actividad económica de los países emergentes", explicó.
En ese sentido, confió en que las potencias emergentes asuman compromisos de cumplimiento obligatorio, aunque como parte de un trato diferenciado, por el cual se les exigirían recortes menores de sus emisiones frente a los que tendrán que realizar los países industrializados.
Gore instó a que la crisis económica mundial no distraiga a los líderes políticos de la urgencia de tomar acciones frente al cambio climático.
"Copenhague no es un punto de tránsito hacia otra reunión en el futuro. Necesitamos un acuerdo en 2009, no el próximo año. No nos queda tiempo", advirtió.
Consideró totalmente posible "cambiar la infraestructura energética mundial por una que no esté basada en el gas de Rusia, el petróleo de Oriente Medio y combustibles fósiles caros, sino en fuentes interminables de energía gratuita, como son el sol y el viento".
En otro momento del debate, Gore comparó el cambio climático con la burbuja de créditos de alto riesgo ("subprime") que fue el detonante de la crisis financiera.
"Hay 6 billones de dólares de inversiones en el mercado "subprime" del carbón, que funciona bajo el entendido de que es perfectamente normal emitir cada día en la atmósfera 70 millones de toneladas de contaminantes que aumentan el calentamiento global", comentó.
A ello se suma que "diariamente hay 25 millones de toneladas de dióxido de carbono que van a los océanos, a los que les falta oxigeno y que están en un proceso de muerte, mientras que zonas enteras del Círculo Polar se derriten y ya hay evidencia de que ocurre lo mismo en la Antártida".
En su comparación con la crisis de las "subprimes", explicó que "la idea de que podemos continuar en este camino se está colapsando", como lo hizo el mercado de los créditos tóxicos cuando los operadores de mercados se percataron de que los instrumentos financieros que, supuestamente garantizaban esos préstamos, no tenían ningún valor.
Gore consideró que el libre mercado sería perfectamente capaz de colocar un precio racional a las emisiones de dióxido de carbono y de asignar capital a las formas eficientes de producción de energía limpia.
Comentario:
Efectivamente, cuando ocurre un desastre natural, los pobres son los que siempre resultan más afectados. ¿Por eso tal vez sea esa la razón por la que los países más ricos hacen muy poco por planeta en el que viven? Pero lo que parecen ignorar es que tarde o temprano, la naturaleza también a ellos les cobrará la factura.
Fuente: Alejandro Flores King en Acuario Político - Foto: Wikipedia
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